¿Te gustaría probar el gusano de la palma? Este insecto comestible se come en tres continentes, no solo por su sabor, sino por su valor nutricional. Descubre por que el que lo prueba repite.
Índice
Características
El gusano de la palma es la larva de un escarabajo de la especie Rhynchophorus. También es conocido por el nombre de picudo de la palma, sagú o chontaruro.
Tienen un tamaño aproximado de 10 cm de largo y 5 cm de ancho y pesa 6 o 7 gramos. El ciclo de vida del picudo rojo es de siete a diez semanas.
Este gusano vive en el interior del tronco del árbol de la palma.
En los trópicos, los podemos encontrar durante todo el año. Estos insectos atacan el árbol de la palma, en ocasiones, las palmas que se han caído sirven como sitios de reproducción y por esta razón, a menudo se talan intencionadamente. Esta práctica es común en el amazonas.
El gusano de la palma como plaga
El gusano de la palma es una plaga y causa un daño importante en muchas variedades de la palma, al vivir en el interior del tronco es muy difícil combatirlos con pesticidas.
El picudo rojo ataca varias especies de palmeras, las más importantes son la palma de coco, palma datilera, sagú, la del aceite de palma y la palma Raphia.
Las hembras adultas del picudo rojo ponen unos cientos de huevos en las hojas de la planta o directamente en el tronco de la palma. Las larvas se entierran en el tronco, del cual se alimentan, causando la muerte a la planta.
El picudo rojo de la palma, es frecuente en la mayoría de los países asiáticos y en medio oriente, llego al mediterraneo en 1980 como una especie invasora destruyendo mas de 1300 palmeras datileras en Sicilia en agosto de 2009. El escarabajo también se ha extendido a lo largo de la costa mediterránea e invadió parte de Italia y España.
El principal método de control en todo el Mediterráneo es el uso sistemático de insecticidas.
Comer gusanos de la palma
Estas larvas de cuerpo blando y gorgojos de la palma (escarabajos) son ampliamente consumidos en América (Rhynchophorus palmarum), Asia sudoriental (Rhynchophorus ferrugineus) y África tropical (Rhynchophorus phoenicis).
Estos gusanos siempre han formado parte de la dieta de los indígenas del amazonas pero actualmente su popularidad se difundió hacia las ciudades donde lo consumen vecinos y turistas. En Tailandia su consumo también está muy extendido y es muy fácil encontrarlos en los puestos callejeros.
Es muy versátil a la hora de cocinarlo, se pueden comer crudos, cocidos, fritos o a la brasa. Si los pruebas por primera vez una opción es tomarlos con salsa de chile. Son muy populares en los puestos callejeros ensartados y después a la parrilla, así resultan realmente sabrosos, es la manera preferida de los viajeros.
También se pueden tomar crudos mojados en una salsa de chile, limón, ajo y soja, si los tomas de esta manera ten cuidado con la cabeza, tienes que arrancarla antes de comerlo. El gusano de palma tiene unas mandíbulas muy potentes y si te lo metes vivo en la boca podría morderte.
Las larvas del picudo rojo generalmente se recolectan, lavan y fríen para su consumo. No es habitual agregar aceite porque las larvas tienen un alto contenido de grasa y exudan aceite durante el cocinado. Las larvas del gorgojo de la palmera africana contienen hasta un 69.78% de grasa.
Las personas que han probado la larva de sagú, describen su textura y sabor como cremosas cuando están crudas y dulces cuando se fríen. Su delicioso sabor viene dado, según los entendidos, por su alto contenido en grasa.
Se las condimenta comúnmente con cebolla, pimienta, y sal. Un plato gourmet son los gusanos de palma salteados con jengibre.
Una comida llena de nutrientes
Las larvas del picudo rojo son una excelente fuente de varios nutrientes como magnesio, potasio, calcio, hierro, fósforo y zinc, así como aminoácidos y ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados saludables. Son además como casi todos los insectos comestibles una gran fuente de proteínas.
Entre los alimentos de origen animal que consumen los Aché, en el este de Paraguay, estos gusanos son los mejores proveedores de energía, incluso mejores que la miel, por lo que las larvas de palma son como barritas energéticas naturales.
Rhynchophorus phoenicis es rico en estos ácidos grasos poliinsaturados y también contiene ácidos linoleico y α-linolénico, dos ácidos grasos esenciales particularmente importantes para el desarrollo saludable de niños y bebés.
Detectando las larvas
En la República Democrática del Congo las mujeres para detectar las larvas en los arboles ponen sus orejas contra estos y escuchan el sonido que hacen los gusanos al masticar. La misma practica es utilizada en Camerún y en República Centroafricana.
En Italia, los inspectores forestales utilizan dispositivos electrónicos de escucha para detectar infestaciones tempranas del picudo rojo de la palmera. Cuando se manifiestan los síntomas del daño, irremediablemente la palmera morirá.
Cultivo de larvas en Indonesia.
Algunos pueblos indígenas del sudeste de Asia ya cultivan semilleros de palma, como el Sagú (Rhynchophorus ferrugineus), que se alimenta de la palma de Sagú. Tiran las palmeras deliberadamente para que crezcan las larvas del gorgojo de la palma, y entre uno y tres meses más tarde se pueden encontrar hasta 100 larvas en un solo tronco.